Los pasados 11 y 12 de Febrero Iruñea ha acogido el primer Foro Mundial del Talento, Ágora Talentia, que ha reunido a los mayores expertos nacionales e internacionales, representantes de la investigación y de la empresa, con el fin de buscar una gestión rentable de este bien, el talento, que aunque un poco escondido, al decir de los expertos, participamos todos de él.
¿Que en qué consiste el talento? En palabras de los organizadores, el talento «se ha convertido en el valor más perseguido por empresas, instituciones y organizaciones que se agarran a él como detonante de futuras acciones de éxito, pero a pesar de su inexcusable importancia todavía no existe hoy en día ni una definición universal de la palabra talento ni, en consecuencia, una gestión rentable de este bien».
Pues bien, que el mundo descanse tranquilo, en el viejo Reyno, en sólo dos días, los expertos han desentrañado lo que escondía el misterioso concepto para beneficio de la humanidad entera.
Todo el mundo, pobres y ricos, hombres y mujeres, creyentes y ateos, guapos y feos, puede firmar en www.agoratalentia.es la oficial Declaración Navarra sobre el Talento, que a manera de prólogo declara: «La lucha por el talento ha terminado. El talento ha vencido». Si el ágora griega mantuvo el debate durante siglos y fracasó, en Nafarroa, ¡y nos llamaban naburros!, lo hemos conseguido en dos días, con dos cojones.
Y desde la capital del Reyno los expertos talentosos y talentudos hacen «una llamada al mundo en general, y a Europa en particular», «a los gobiernos, empresarios, instituciones educativas y particulares a comprometerse con el desarrollo y el fomento del talento», para salir de la crisis siendo creativos. Pues la crisis que nos envuelve, nos dicen, no es una crisis estructural. Tampoco exclusivamente financiera, sino una crisis de valores y de falta de creatividad. En resumen, de talento.
Uno de los principales frenos para su desarrollo es el empleo fijo. Eso, dice uno de los expertos, hace acomodarse impidiendo la creatividad del trabajador. La flexibilidad a la par que incentiva resulta más dinámica. ¡Vas a comparar!
650 euros de vellón, 650 de los antiguos talentos para participar en el Ágora montada por los expertos del timo de la estampita. Imagino a los participantes de más talento presos de agorafobia para el resto de sus días. Otros, por aquello del amor propio, negarán el desfalco incluso bajo tortura. Los más necios presumirán de talento navarrensis y nos aburrirán hasta la náusea con supuestos conceptos de cinco duros pagados a 650 euros.
No soy de los que participan de la sentencia de que todo pueblo tiene los gobernantes que se merece, pero a veces, queridos, una horrible sensación atenaza mi espíritu y siento una vergüenza infinita de ser gobernado por los seres más imbéciles que ha dado la evolución de nuestra especie. Sobre todo ahora que celebramos el bicentenario del nacimiento de Darwin. La selección natural de los más aptos, aquí en Nafarroa, hace aguas. Quizás aquí seamos el producto de un dios creador y rematadamente imbécil que nos hizo a su imagen y semejanza.
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