Javier Eder
En la mañana de ayer, las ventiscas de nieve azotaron el lugar de la calle F, en el polígono de los Agustinos -dos rotondas más allá del híper Eroski, a la derecha-, donde una representación de los trabajadores de Ochoa-Lácar, cada mañana de nueve a once, sigue oponiéndose a que ocho compañeros sean condenados a esa variante de la muerte civil que es un despido fulminante. Las ventiscas de nieve formaban remolinos en las calles abiertas de esa ciudad del trabajo que es los Agustinos, pero el pequeño y solitario grupo aguantó frente a la ventisca y frente a la marea que viene. En la mañana de ayer, el presidente de un partido que se declara progresista publicó en la prensa un lírico artículo sobre el solitario magnolio que queda en otro abandonado colegio de frailes -no en el de los Agustinos- y que habría que salvar. Mal rayo parta al lirismo y a los magnolios de los poetas . En la mañana de ayer, y en la de anteayer, los periódicos publicaban las sonrientes fotos de distintas comisiones parlamentarias, con representación de todo el espectro -nunca mejor dicho- político, que habían visitado tal lugar o tal colegio de frailes abandonado -no el de los Agustinos, ése no-. En todas las fotos los alegres visitadores lucían la amplia sonrisa del que ha ganado el famoso concurso La vida resuelta y, en consecuencia, no se va a dejar caer por polígonos industriales crecidos alrededor de un colegio abandonado de frailes como el de los Agustinos, donde las ventiscas azotaban ayer y donde cada día azota la marea que deja fuera del trabajo a los jóvenes por el hecho de serlo, a los mayores porque llegó su hora antes de hora y a los de mediana edad porque sonó su nombre en el infame concurso Queda usted despedido . En la mañana de ayer las noticias volvieron a hablar del tiempo, pero no dijeron mucho de las rachas de muerte civil que pegan por las ciudades perdidas del trabajo, donde hay solitarios que resisten frente al viento, frente a la marea y frente a la dolorosa indiferencia.
0 comentarios:
Publicar un comentario